¿Cuál es el diámetro de la Tierra?

La Tierra tiene una forma muy parecida a la de una esfera achatada en los polos. Sin embargo, cuando se habla de las dimensiones terrestres, normalmente se considera como si fuera una esfera perfecta y se promedian sus medidas. 

Una de las cifras más utilizadas es el diámetro de la Tierra. Es decir, la distancia que existe entre dos puntos opuestos de la superficie pasando por el centro. Este parámetro nos da una idea aproximada del tamaño de nuestro mundo. Es muy útil sobre todo, en numerosos cálculos y comparaciones planetarias.

El diámetro terrestre, no es igual en todas las direcciones. Es debido a la ligera deformación polar antes mencionada. Por ello, se suelen manejar dos valores. Uno es el diámetro ecuatorial, medido sobre el ecuador. El otro es el diámetro polar, que une ambos polos. El promedio de estas dos longitudes se toma como diámetro medio de la Tierra.

Medidas exactas 

Diámetro ecuatorial

El diámetro ecuatorial de la Tierra, es la distancia que existe entre dos puntos situados sobre el ecuador pero en lados opuestos del planeta. Al medirse sobre la línea ecuatorial, esta distancia resulta ser la máxima posible y se corresponde con el diámetro mayor de nuestro geode. Su valor es de 12.756,2 kilómetros o 7.926 millas.

Diámetro polar 

El diámetro polar, es ligeramente inferior al ecuatorial. Esto se debe al achatamiento polar, anteriormente mencionado. Este hace que el radio de la Tierra sea menor en los polos. El diámetro polar mide 12.713,5 kilómetros, unos 42 kilómetros menos que sobre el ecuador. Esto supone una diferencia de alrededor del 0,3%.

Diámetro medio 

Dado que la Tierra no es una esfera perfecta, su diámetro varía según la dirección en la que se mida. Por esto, normalmente se utiliza un valor medio que sirve como referencia estándar. 

El diámetro medio de la Tierra se calcula promediando el diámetro ecuatorial y el polar. Su resultado es de 12.742 kilómetros o 7.918 millas. Este diámetro medio terrestre, equivale a una circunferencia de 40.075 kilómetros siguiendo el ecuador.

Comparación con otros cuerpos celestes 

Frente a los planetas telúricos la Tierra es el mayor de los planetas telúricos o rocosos del Sistema Solar, seguida por Venus y Marte. Nuestro mundo también destaca por tener la mayor densidad de este grupo planetario. 

Así, el diámetro de la Tierra duplica holgadamente el de Marte, que es de 6.779 kilómetros. Y supera ligeramente los 12.104 kilómetros de diámetro de Venus. Por su parte, Mercurio, el planeta telúrico más pequeño, tiene un diámetro tres veces inferior al terrestre.

En relación a los gigantes gaseosos 

Los planetas gigantes gaseosos o jovianos, tienen diámetros muy superiores al de nuestro planeta. Destaca especialmente Júpiter, el mayor del Sistema Solar. Tiene un diámetro ecuatorial de 142.984 kilómetros, más de 11 veces el de la Tierra. Le siguen Saturno, Urano y Neptuno, todos ellos también de tamaños claramente mayores que el terrestre aunque inferiores al de Júpiter.

Frente a otros cuerpos del Sistema Solar 

Si se compara con otros cuerpos celestes más allá de los planetas, el diámetro de la Tierra igualmente destaca. Así por ejemplo, el mayor asteroide, Ceres, no llega a los 1.000 kilómetros de diámetro. Y ninguna de las lunas del Sistema Solar supera los 5.000 kilómetros de diámetro.

La Tierra en el contexto cósmico 

A escala cósmica, con sus casi 13.000 kilómetros de diámetro, la Tierra no deja de ser un mundo de tamaño modesto. Los astrofísicos han descubierto numerosos exoplanetas, fuera de nuestro sistema solar, que superan varias veces su tamaño. 

Además, la Tierra empalidece en comparación con las inmensas estrellas. El Sol, por ejemplo, tiene un diámetro 109 veces mayor que el de nuestro planeta. Y las mayores estrellas conocidas, llegan a medir más de 1.500 veces el diámetro terrestre.

Conclusión 

El diámetro de la Tierra es un parámetro fundamental, para entender las proporciones de nuestro mundo en relación al resto del Sistema Solar y del cosmos. Sus casi 13.000 kilómetros de media, nos hablan de un planeta mayor que el resto de los mundos rocosos.

Sin embargo, es muy pequeño en comparación con los gigantes gaseosos y los grandes cuerpos estelares del Universo. Unas dimensiones que, por otra parte, hacen de la Tierra un lugar especialmente acogedor para el desarrollo de la vida tal y como la conocemos.