El libro tibetano de los muertos ¿Qué nos espera tras la muerte?
La muerte es, probablemente, el mayor enigma al que nos enfrentamos los seres humanos. ¿Qué ocurre cuando nuestro cuerpo físico expira? Las principales religiones han tratado de dar respuesta a esta pregunta fundamental. El budismo tibetano lo hace a través de un texto único: el Bardo Thodol.
Este libro, conocido también como Libro Tibetano de los Muertos, describe con detalle los estadios por los que transita la conciencia tras abandonar su envoltorio carnal. Su propósito: orientar al difunto para alcanzar la liberación.
El bardo que decide nuestro destino final
Según revela este manual sagrado, la muerte no es el final definitivo. Se abre ante nosotros todo un proceso de transición espiritual llamado bardo, una suerte de estado intermedio. Y lo que hagamos en él resultará decisivo.
Si logramos reconocer la verdadera naturaleza de la realidad y de nuestra mente, habremos alcanzado la meta suprema: liberarnos del ciclo de muerte y renacimiento. Veamos qué fases atravesaremos en este viaje interior sin retorno.
El luminoso despertar de la Conciencia Primordial
Tras exhalar el último aliento, nuestra conciencia se expandirá y accederá a su verdadera esencia: la luminosidad clara e infinita de la Conciencia Primordial. Se manifiesta como una radiante luz blanca, cargada de dicha y vacía de forma.
En este preciso instante, si reconocemos que esa naturaleza lumínica es nuestro auténtico ser, alcanzaremos la liberación. Nuestro yo convencional se disolverá para siempre en la Conciencia Primordial.
Pero mantenernos en este estado de Gracia resulta extraordinariamente difícil. El Libro Tibetano nos insta una y otra vez a conseguirlo. De lo contrario, seguiremos vagando por el tortuoso bardo.
Las alucinantes visiones del bardo
Incapaces de sostener esa luminosidad en toda su intensidad, a continuación comenzaremos a experimentar una cascada de vívidas e intensas visiones. emergerán de nuestra propia psique, condensando todo el karma y las emociones acumulados en vidas pasadas.
Son los famosos bardos: estadios oníricos que se suceden tras la muerte y anticipan nuestro próximo renacimiento. En ellos se manifiestan desde paisajes infernales y aterradores, hasta figuras monstruosas, espejismos seductores e incluso la visión de nuestros seres queridos.
Afrontar la ausencia de un ser amado: el duelo y sus etapas
Perder a alguien muy cercano que se ama profundamente es uno de los momentos más dolorosos de la vida. Elaborar ese duelo puede resultar complicado. Pasamos por diferentes fases emotivas hasta que logramos cierto grado de aceptación. A veces nos aferramos a la negación o la ira.
Otras caemos en una honda tristeza y desmotivación. Superar ese sufrimiento emocional para volver a sentir algo de alegría, puede llevarnos un tiempo. La vida se nos hará cuesta arriba. En estos momentos de zozobra interior, podemos encontrar consuelo y orientación en recursos espirituales. No hay que temer buscar cobijo en la fe o la espiritualidad. Un ejemplo claro es el Bardo Thodol o Libro Tibetano de los Muertos. ¿Qué luz aporta sobre la muerte y el proceso del duelo?
Entender el viaje del alma más allá de esta vida
Uno de los aspectos que más angustia produce tras el fallecimiento de un ser amado es la incertidumbre sobre su destino. ¿Continuará de algún modo su conciencia? ¿Reencarnará en otro cuerpo físico? Las dudas nos asaltan.
El Libro Tibetano de los Muertos aporta respuestas elocuentes a todas estas preguntas desde la sabiduría milenaria del budismo tibetano. Ofrece una descripción pormenorizada de las fases del bardo.
Se trata del estado intermedio por el que transita la conciencia entre dos encarnaciones. Comprender este proceso, que culmina con el renacimiento, alivia enormemente el desasosiego. Si estás pasando por este proceso tan doloroso, o alguien a quien conoces, no dudes en recomendarle su lectura.
Cómo guiar espiritualmente a nuestros difuntos
Además de tranquilizarnos al saber que la vida continúa para quienes amamos, el Libro Tibetano de los Muertos nos enseña un modo de ayudarles en su viaje post mortem.
Nos indica las plegarias más apropiadas para cada fase, las lecturas que debemos hacer en voz alta junto al lecho de muerte o ante el cadáver antes de su cremación. Incluso cuando alguien ya ha fallecido, seguimos teniendo la capacidad de interceder en su favor, facilitando la disolución de su yo transitorio en la Conciencia Primordial.