Manchas en la pantalla de mi laptop

manchas en la pantalla de mi laptop

Tener la pantalla del portátil o laptop con manchas, puede llegar a resultar muy molesto. Esos puntos grasientos o, esas salpicaduras de café, restan luminosidad a la imagen y dificultan la lectura. Además, la suciedad acumulada durante su uso diario no solo empeora la visibilidad. Puede también provocar daños permanentes, si no la eliminamos a tiempo.

Por suerte, limpiar correctamente la pantalla del ordenador, no requiere unos grandes conocimientos técnicos. Con unos sencillas pasos, los propios usuarios pueden dejar su monitor como nuevo. Alargando así la vida útil del dispositivo. Eso sí, es importante conocer el tipo de suciedad al que nos enfrentamos, para saber cual es el sistema de limpieza más eficaz.

Tipos de suciedad 

Huellas dactilares y polvo Las temidas huellas dactilares son las protagonistas indiscutibles de las manchas en pantallas de portátiles. Esa grasa natural de los dedos queda impregnada sobre la superficie al utilizar el teclado. Con el paso de las horas, el polvo ambiental se adhiere a esos restos grasientos provocando la antiestética capa que todos conocemos.

Líquidos y salpicaduras 

Cualquier líquido, como agua, zumos, café o té puede acabar salpicando la zona de la pantalla, cuando trabajamos con el portátil. Si no actuamos rápido, esas gotas se secan dejando residuos sólidos muy complicados de disolver. En el peor de los casos, un derrame abundante de líquido puede causar daños irreparables en los componentes electrónicos.

Cómo limpiar las manchas

Para eliminar la suciedad leve, como huellas y polvo, solo es necesario utilizar un paño especial de microfibra ligeramente humedecido. Debemos pasarlo suavemente, por toda la superficie. Sin restregar en exceso ni ejercer una presión muy fuerte. Otra opción, es emplear toallitas húmedas específicas para monitores. Estas contienen alcohol isopropílico en su composición. 

Procedimiento paso a paso 

Veamos el proceso recomendado para dejar la pantalla de nuestro portátil reluciente: 

Apagar el equipo. Lo primero es desconectar el ordenador y apagar la pantalla. Así evitaremos cualquier tipo de descarga eléctrica, durante la limpieza. 

Retirar el polvo suelto. Con mucho cuidado, pasamos un paño de microfibra seco por la superficie, para eliminar la suciedad y las partículas de polvo más superficiales. 

Aplicar el producto limpiador. Pulverizamos una pequeña cantidad de limpiador para monitores sobre nuestro paño. Lo extenderemos de manera uniforme evitando que gotee. 

Limpiar con suavidad. Frotamos con cuidado toda la zona de la pantalla con movimientos circulares. Sin olvidar los bordes. No debemos ejercer una presión excesiva para no rayarla. 

Consejos extra 

Además de la limpieza periódica con un paño húmedo, existen otros trucos caseros para mantener la pantalla impoluta durante más tiempo y prevenir las temidas manchas: 

Cubrir el teclado con una funda protectora, evitará que se acumule suciedad y grasa en las teclas que luego se transferirá a la pantalla. 

Usar un filtro de privacidad adhesivo para monitor bloqueará las gotas de saliva y otros fluidos corporales, que puedan salir despedidos mientras tosemos o hablamos cerca de la pantalla. 

Situar el portátil lejos del borde de la mesa nos permitirá reaccionar a tiempo, en caso de que se derrame alguna bebida y evitará accidentes. 

Limpiar la pantalla de forma regular, con los productos adecuados, aunque no se aprecie suciedad acumulada a simple vista, mantendrá el monitor en un perfecto estado. 

Con estos sencillos consejos de limpieza y, unas gotas de paciencia, recuperaremos la claridad original en la pantalla de nuestro portátil. Y lo mejor de todo, alargaremos su vida útil, evitando así las temidas y costosas reparaciones o sustituciones.