Pachita, la chamana que trasplantaba órganos y curaba con sus manos ¿mito o realidad?

Pachita chamana

Pachita es el nombre por el que se conoce a Bárbara Guerrero, una controvertida chamana mexicana que se volvió famosa internacionalmente en el siglo XX. ¿Sus habilidades? Nada menos que realizar complejas cirugías y trasplantes con sus propias manos como único instrumento. ¿Realidad o simple mito?

Orígenes de una chamana

Bárbara nació en 1897 en Sierra Mojada, un pequeño pueblo minero de Chihuahua, México. Desde niña afirmó tener visiones y habilidades paranormales como clarividencia, telepatía o psicokinesis. Pasó años perfeccionando sus dones mediante un durísimo aprendizaje con chamanes indígenas.

¿El resultado? Una impresionante capacidad de diagnóstico y una habilidad quirúrgica fuera de lo común realizando operaciones sin bisturí, tijeras ni anestesia. Solo la energía de sus manos como instrumento y algún que otro cuchillo.

Testigos de los prodigios

A lo largo de cinco décadas, miles de personas de todo México y el mundo acudieron a Pachita en busca de curación para todo tipo de enfermedades, desde problemas digestivos o artritis hasta tumores o presuntas obstrucciones de órganos internos. Los relatos sobre sus portentos se expandieron como la pólvora.

Según aseguraban con asombro, Pachita era capaz de introducir su mano en el vientre del paciente extrayendo el órgano enfermo para luego devolverlo a su sitio tras un masaje. Incluso hay testimonios de supuestos trasplantes de órganos entre personas. Todo ello sin anestesia, sin dejar marcas externas y con una asombrosa tasa de éxito. ¿Es posible tamaño prodigio?

Búsqueda de una explicación

Ante semejantes historias, la comunidad científica se mostró cuando menos escéptica. Consideraban imposible la cirugía sin instrumentos y potencialmente fatal la ausencia de anestesia. Pero algunos quedaron cautivados, como el científico Jacobo Grinberg. ¿Podían existir fenómenos paranormales capaces de desafiar las leyes médicas? Decidió estudiar el caso.

Asistió a numerosas sesiones, documentó exhaustivamente los métodos de Pachita e incluso publicó varios libros al respecto. Planteó hipótesis sobre campos de energía humana, percepción extrasensorial o poderes psicokinéticos. No logró demostrar que se tratase de algo sobrenatural, pero para muchos su trabajo otorgó cierta credibilidad al fenómeno Pachita.

Conclusiones sobre un mito vivo

Sea verdad o simple ilusión, lo cierto es que aún hoy la chamana Pachita despierta fervor entre sus adeptos y recelo entre la comunidad médica. Su leyenda sigue viva. ¿Mito, fraude o realidad? Pocos lo saben. Lo que es indudable es que esta singular mujer dejó huella con sus controversiales poderes curativos, convirtiéndose en todo un icono de la medicina popular latinoamericana.

Quizás algún día la ciencia logre desvelar el enigma… si es que hay enigma. Mientras tanto, el fascinante recuerdo de Pachita y sus mágicas manos pervive.