Significado de soñar con volar
Soñar con volar es una experiencia onírica bastante común que puede tener múltiples interpretaciones. Los sueños son manifestaciones de nuestro subconsciente que utiliza imágenes y símbolos para expresarse. Cuando desciframos esos símbolos podemos encontrar significados profundos sobre nosotros mismos.
¿Qué nos querrá decir nuestra mente cuando nos hace sentir que volamos en ese mundo imaginario? Existen diversas teorías al respecto que analizaremos en este artículo. Descubriremos juntos el sentido liberador pero también incierto que puede encerrar este tipo de ensoñaciones.
Sentimiento de libertad
Uno de los significados más extendidos sobre los sueños de vuelo es la libertad, la independencia o la falta de ataduras. En el sueño podemos escapar de la gravedad y las limitaciones físicas.
Escapamos volando con total fluidez que rara vez experimentamos en la vigilia. Es como si durante unos instantes fuéramos dueños de nuestro destino y no hubiera nada que nos ate al suelo.
Esa libertad de movimientos se asocia a menudo con una liberación de las presiones y responsabilidades en tu vida real. Cuando volamos en sueños escapamos de todo, por ejemplo de los problemas cotidianos. Nos distanciamos de las preocupaciones del día a día. Es un momento donde solo importamos nosotros.
Perspectiva amplia de la realidad
Otra interpretación habitual de las ensoñaciones de volar es que representan la capacidad de tener una perspectiva más amplia sobre nuestra vida y sobre el mundo en el que vivimos.
En esos sueños podemos contemplar el paisaje desde arriba, con una visión de conjunto que abarca mucho más espacio que la limitada mirada desde la tierra.
Es como si el subconsciente nos sacara de nuestra experiencia subjetiva para mostrarnos la realidad desde otro punto de vista. Ver todo desde arriba permite que adquiramos más objetividad sobre los problemas que nos agobian. Situaciones que desde abajo nos resultan agobiantes, desde el cielo se relativizan y pierden toda su importancia. Al fin y al cabo, la vida son dos días y no deberíamos preocuparnos por nmiedades ¿No crees?
Confianza y seguridad personal
El hecho de que en el sueño seamos capaces de volar también se puede interpretar como un indicio del nivel de confianza y seguridad que tenemos en nosotros mismos. En esos vuelos oníricos normalmente no sentimos vértigo o temor a caer, sino que fluimos ligados por el cielo con total naturalidad. No necesitamos alas ni artificios, nuestro propio cuerpo se eleva y desafía a la física.
Esa capacidad de volar sin ayudas revela la enorme confianza que el subconsciente tiene puesta en las posibilidades de la psique. Si en el plano mental podemos volar, es señal de que no hay sueños imposibles en el plano real. Nuestra seguridad onírica se extrapola a nuestra vigilia otorgándonos esa dosis extra de confianza para perseguir nuestros anhelos.
Creatividad desbordante
Otra lectura emblemática de este tipo de ensoñaciones es que representan la creatividad, la imaginación y la originalidad mental que todos llevamos dentro. El acto de volar desafía las leyes físicas, supera lo convencional, ignora las limitaciones de la realidad. Para volar hace falta concebir algo que vaya más allá de lo ordinario.
Las personas especialmente creativas suelen tener este tipo de sueños con más frecuencia. Es como si su mente estuviera tan habituada a pensar fuera de los esquemas y a proponer ideas innovadoras, que ese ejercicio se trasladara a sus horas de descanso. La creatividad no entiende de horarios, fluye libre tanto de día como de noche.
Progreso y superación
Junto con la libertad, los sueños de vuelo también pueden interpretarse como un anhelo de progresar, de elevarse por encima de las circunstancias actuales. Cuando volamos alto y veloz en la ensoñación es porque ansiamos ascender a una posición mejor, más elevada espiritual y emocionalmente.
A menudo los obstáculos de la vida real nos impiden dar el salto necesario para mejorar nuestra situación. Así que el subconsciente recurre al vuelo onírico para manifestar ese deseo pendiente de superarnos y llegar más lejos. Nos muestra mediante imágenes lo que aún no hemos conseguido hacer entre las paredes de nuestra habitación.
Evadir los problemas
Hasta ahora todas las interpretaciones sobre los sueños de vuelo eran positivas. Pero también puede tener un lado más preocupante. En algunos casos, representa la incapacidad para hacer frente a los problemas cotidianos, huir de las responsabilidades.
Cuando los conflictos nos superan, el subconsciente puede recurrir al mundo onírico para evadirse de la realidad en lugar de afrontarla. Nos refugiamos en un universo de fantasía donde podemos escapar de los problemas en vez de resolverlos. Esta huida, aunque solo sea en sueños, nos proporciona alivio, pero al despertar seguiremos atrapados en las mismas dificultades.
Experiencia placentera
Más allá del significado concreto, los sueños de vuelo suelen ser experiencias muy placenteras. La sensación de ingravidez, libertad y dominio sobre el entorno resultan emociones gozosas, al menos mientras dura la ensoñación. Es fascinante comprobar cómo el cerebro puede generar sensaciones tan vívidas sin estímulo externo alguno.
Incluso aquellos a quienes les da vértigo volar en aviones, se muestran felices cuando lo hacen en sueños. Quizás porque en el plano onírico no hay peligro real, todo está bajo el control de nuestra psique. Nos movemos con confianza porque sabemos que ese mundo interno no puede dañarnos.